En 1964, un joven apasionado por el atletismo llamado Phil Knight comenzó a soñar con una revolución. No quería solo vender zapatillas; quería desafiar la manera en que las personas se enfrentaban a sus límites. Desde el maletero de su coche, Knight recorría Oregon vendiendo zapatillas importadas, pero su sueño era más grande: deseaba crear una marca que inspirara a todos, desde atletas de élite hasta personas comunes, a superar sus miedos y perseguir lo imposible. Sin embargo, a...